El tubular CHALLENGE Limus 33 : Todas las tubulares y tubulares abiertas producidas por Challenge son productos especiales. Una máquina no es capaz de producirlas y la destreza manual requerida en cada paso de su elaboración marcan la diferencia para obtener un estándar de calidad muy alto. La carcasa está elaborada con lo último en materiales técnicos, como el Corespun (una combinación de algodón y poliéster). El Corespun es una hebra de la que se obtiene una carcasa muy flexible pero resistente y con un peso reducido. La carcasa cuenta con un número de TPI elevado que puede llegar a más de 300 TPI. El proceso de producción de Challenge previene cualquier proceso de vulcanización para permitir que los materiales mantengan su elasticidad y flexibilidad. La banda de rodamiento se pega a la carcasa cuidadosamente a mano, la cual ha sido montada e inflada en la llanta. Al seguir este método, la banda de rodamiento queda colocada de un modo más distendido sobre la carcasa y no provoca tensión alguna al inflarse. El resultado obtenido es una menor resistencia a la rodadura, mayor comodidad, una mejor precisión en el manejo de la bicicleta y una mayor adherencia. Las tubulares elaboradas a mano son populares entre los profesionales, el tipo de cubiertas preferido para carreras largas por etapas. Para conseguir el mejor agarre posible en curvas, Challenge ha utilizado los materiales más novedosos para obtener flexibilidad y elasticidad, gracias a lo que se consigue una absorción más adecuada de las superficies irregulares para poder ofrecerte el mejor contacto posible con el terreno. La rueda evita saltar y la cubierta se deforma y absorbe las irregularidades del terreno, funcionando en cierta manera como un amortiguador de impactos. El material especial colocado entre la banda de rodamiento y la carcasa, la tecnología PPS (Puncture Protection System), incrementa la resistencia a los pinchazos. Ir cómodo significa reducir las vibraciones molestas de las muñecas y el cuello, vibraciones que podrían causar problemas inflamatorios ya que las cubiertas más rígidas transfieren todas las vibraciones directamente al cuerpo del ciclista.